Aquello de que nadie es profeta en su tierra versa a la perfección para la Cabernet Franc quizás la más tradicional de las variedades bordelesas pero que en su tierra natal no pasa de ser usado para moderar la acidez del Cabernet Sauvignon del Médoc o robustecer los taninos del Merlot en Saint Emilion, sin embargo trescientos kilómetros al norte, en las frías colinas del Loira, se alza como rey indiscutido de las variedades tintas del Jardín de Francia,

Definitivamente el clima frío y el Cabernet Franc forman una buena dupla y cuenta de ello dan no sólo los vinos de Chinon sino también aquellos producidos en las alturas mendocinas donde se ha convertido en el nuevo emblema argentino y los que cada vez se acercan más a las costas del Pacífico en Chile.

Uno de estos ejemplares es el Cabernet Franc Unfiltered de Loma Larga proveniente del valle de Casablanca y con 20 meses de crianza en barricas de distintos usos.

Vino rubí de traza violeta y borde claro cuya nariz nos muestra cereza, ciruela, mora, hoja de tomate, humo, tabaco y caramelo, en tanto su boca es de cuerpo voluptuoso pero con una alta acidez que le aporta fluidez, tanino maduro y firme con madera perfectamente integrada; final frutal con nota de té negro.

Muy buen equilibrio entre cuerpo y acidez además de su balance entre fruta y herbáceos, persistencia media, marcadas e intensas notas frutales y una buena muestra de la complejidad de la cepa.

Nota: 3,8 – Muy buen ejemplar de la cepa en un terroir que se consolida para estos tintos.

Buena opción para acompañar carnes asadas, guisos especiados, pastas con salsas intensa o pizzas con presencia de tomates y quesos sedosos como la Caprese.