El sacerdote español Francisco de Carabantes fue quien inició la producción vitivinícola en Chile en base a parras de Listán Negro, que hoy conocemos como uva País, traídas de las Islas Canarias con el fin de producir vino para misa, plantando para ello un viñedo en las afueras de Concepción en 1548, y es en honor de este primer padre de la enología nacional que Viña Von Siebenthal bautizó con su apellido su muy buen Syrah producido en Panquehue.

Los cuarteles de donde proviene Carabantes se encuentran en el curso medio del Aconcagua en uno de los mas destacados terroirs nacionales que poco o nada tiene que envidiar a Apalta o al Maipo Andes. pues Panquehue es hogar icónicos mostos como Seña, Don Maximiano, Kay o Montelig, por mencionar algunos.

Este Syrah de Von Siebenthal cuenta con un aporte de un 15% de Cabernet Sauvignon y un envejecimiento de 18 meses en barricas de roble 50% francesa y 50% americanas, la mitad de estas de primer uso.

Rubí de capa alta y traza violeta que en nariz entrega mora en compota, guinda, ciruela, violeta y lavanda, hierba provenzal, cassis, dejo cárnico y piso forestal.

Su boca es particularmente intensa, de fruta viva y acidez punzante, taninos gruesos, maduros y firmes, de largo final donde arándano y ciruela se funden notas de café expreso y licor de hierbas.

Vino de larga y grata persistencia, de adecuada complejidad con amplio margen de mejora; intensidad desbordante que requiere pulirse en botella para alcanzar un perfecto equilibrio.

Nota: 4,3 – Hoy un muy buen vino pero con un potencial de evolución que lo puede volver sobresaliente en una década.

Perfecto compañero de cortes grasos de carne asados como lomo vetado, costillar o pierna de cerdo y sobre todo cordero, ya sea asado y en especial junto a Carré a las Finas Hierbas.